martes, 5 de febrero de 2008

Toques.

En esta nueva era tecnológica que estamos viviendo, aun sorprende la cantidad de recursos que tenemos a nuestro alcance para poder comunicarnos en cualquier circunstancia, ahorrando tanto tiempo como esfuerzos innecesarios.
Actualmente, podemos "dialogar" cuando vamos en nuestro coche, mientras conducimos, si encendemos el Bluetooth y utilizamos la opción de "voz", también es posible que el GPS nos lleve a cualquier lado, y es posible ver lo que hacen otras personas en su tiempo libre, si nos dedicamos a buscar videos en el youtube (y, creedme, la gente tiene hobbies para todos los gustos!).
Pero, sin duda, uno de los elementos clave en este desarrollo ha sido el móvil.
Lo que más me llama la atención, entre todos los usos que ofrece uno de estos aparatitos, es la posibilidad de dar "toques" o hacer llamadas perdidas.Ay de ti si te da por coger el teléfono cuando te dan un toque!! Es increíble cómo un sonido tan breve, o la mera aparición en pantalla de un nombre, sin más, puede convertirse en un modo de expresión tan polisémico, e implicar tantos significados como intenciones tenga el usuario:
Un toque al móvil de una persona puede significar un mero saludo ("hola, me acuerdo de que existes"), pero también una llamada de atención para que sepa que nos hemos acordado del individuo en cuestión.
También sirve para recordar a alguien una cita, un encargo, una hora...
Con el toque se puede dar a entender que se está llegando al lugar en el que se espera al otro, tanto si vamos en hora, como si nos retrasamos un poco. Igualmente, puede venir a significar “eh, ya he llegado a tu casa, baja a la calle”.
Se puede jugar y tontear con alguien, dándole reiterados toques en un breve espacio de tiempo, y esperando que el otro haga lo propio; pero también pueden significar que se está metiendo prisa a alguien, por algún asunto que urge tratar.
Un toque puede suplir las "buenas noches" con alguien, o "los buenos días"... o, incluso, el dar las gracias.
Con un toque se felicita el cumpleaños, el santo, la Navidad, el Fin de Año o algún logro conseguido.
Igualmente, puede usarse como un "corto y cierro", cuando alguien nos ha mandado un mensaje y queremos decirle que lo hemos leído, pero sin tener que escribir nada de vuelta.
Otro recurso es dar toques a todas las personas que tenemos en la lista de contactos, cuando uno está muy aburrido o se siente solo... a fin de recibir luego algunos "toques de vuelta", y sentir que el mundo te tiene presente, de algún modo,lo sé, este tipo de uso es un poco patético... pero todos tenemos días mimosos en que nos gusta que nos dediquen algo de atención, no?
También se da el caso de que alguien te dé su número de teléfono, lo apuntes en tu agenda, y des un toque para que el otro pueda grabar el tuyo, sin necesidad de dictarlo.
Hay toques que provocan sonrisas, nostalgia, alegría, decepción, hastío o exasperación; hay "alertas" que ayudan a la memoria, que meten prisas, que enfadan, sorprenden o cuestionan a quien las recibe.
Y luego están los toques que me dan mis hijas y no porque se acuerden de su mama querida, si no porque se quedaron sin saldo y quieren que las llame.

5 comentarios:

Ana dijo...

Si yo no entendí mal el concepto, acá no se usa aún esa modalidad.

Lo que sí se usa mucho es el mensaje de texto.

Y ahí debo decir que si bien me parecen muy prácticos, me molestan mucho cuando la persona que los envía no comprende que el SMS es para enviar un saludo, idea, concepto, pregunta, todo corto...

Están las personas que te envían un mensaje, vos los contestás, y luego te envían otro, y otro y otro y otro... y entonces yo ya pienso "esto ya es un diálogo! levantá el teléfono y llamáme que es más fácil!"

Ejemplo de diálogo fastidioso:

- Yo: nos vemos el sábado
- Amiga: dale! genial! gracias por acordarte de mí!
- Yo: de nada, besos
- Amiga: besos para vos también, te adoro!
- Yo: yo también
- Amiga: pero yo más, y estoy para lo que necesites!

Ahhhhggggggggg... esto me irrita mucho. A ese punto, ya no respondo más, pero me pone terriblemente de malhumor!

Pablo dijo...

Anita.. tu dialogo me hizo acordar a alguien! :)

debo decir, que esta bueno mandar un mensaje de texto diciendo : puedo ir a tu casa a darte un toque?

eso es mas practico no? :)

Pedro Martín dijo...

Pablo, eso es una redundancia un toque del toque o el famoso "toque al cuadrado".

Hablando del tema, me acordé de esa persona que cita Ana y es francamente insoportable, siempre pienso que si tendría que mandar un telegrama, se queda sin plata en la calle!


Es una nueva modalidad comunicacional que nos agarra a los cuarentones medio a contrapié, pero bien, ojo, bien!! La rapidez de los pendejos es increible! Escriben mas en el celular que en la escuela!!!

María dijo...

Es lo que tienen los cuarentones pedro martín, ahora el diccionario de la real academia incluirá cuarentañera, por suerte yo no seré cuarentona, eso es de viejosssss.
¿Cuarentona? ¿Cuarentañera? yo me quedo con este ultimo, ya que se molestaron los reales de la academia no le vamos ha hacer el feo.

che dijo...

A mi la verdad que me da igual, ya que ya mismo sere cuarentañero o cuarenton, lo que me importa es el adjetivo que le sigue "interesante",me gustan cuando me lo dicen las compis del curro, je. je.